II. Improbabilidades
1- Ya que…
Ya que no puedo pedirte el olvido
–y no puedo entregarte la memoria–
besame por la espalda, a traición
para que el vino sepa a triunfo
y deje de ser el consuelo de los solos.
Convierte tus lecturas en un libro exitoso
Convierte tus lecturas en un libro exitoso
Deja una respuesta